ANOCHECER: Tributo a la oscuridad

Esta ocasión vengo a entregar parte de la sangre, parte de esta historia que marco mis dias de desolacion y enveneno mi sangre, al final de cuentas la oscuridadserá mi unico y primer amor.

ANOCHECER


Hace tiempo ya de aquella noche, donde ella
Bajo el manto incierto del anochecer se cobijo.
Ese era su sueño y quedo plasmado en papel.

Ahora que lo pienso fue algo cobarde e infantil, pues se concebía a si misma
Como escoria que ni el aire ni la tierra reclamarían para consumirla,
Presencia inerte que sólo anhela desvanecerse entre esos soles.

¡Mentirosa!, eres tan cobarde, que no creo
Que la soledad sea tu voluntad ni tu condena, es tan sólo el fallido intento
De encontrar eso que tantas horas te ha tenido en vela.

Pero esa noche fuiste victima del engaño, creíste que
Habría algo mejor que permanecer, deseaste dormir con el sol
Y esperando romper tu silencio marcaste con tu sangre el papel.


Tus palabras, no son nada ahora, ridículo monologo de un pobre niña
Que no entiende la magia de la noche ni la pureza del silencio,
Eso que deseas, el recuerdo del viaje donde dejas tus lágrimas de cristal

Y que con ella esas viles creaturas terrestres te recuerdan, se rompió, no existe,
Pues no hay quien sea tan tonto para creer que ese fue tú deseo,
Aun ese amor que dijiste sentir, ese anhelo de libertad y de rendición.

Todo se ha visto reducido a un mal criterio de lo que fue la razón del este encierro
Pues tu torre aun persiste, consumida por el tiempo y corrompida por el cielo rojo
Ese que ahora es tal y como lo deseabas ver.

Pero por algo que no entiendo hoy, termino parada aquí
Sentada en este escritorio, como tú aquella noche
En que el viento te prometió libertad, entre estas paredes;
Puedo sentir el peso del dolor, ahora se tu secreto.

Y aun así, son solo piedras y papel; recuerdos muertos
De un alma que cayó en el autoengaño para sentirse al menos algo acogida,
Tus palabras malditas, tu sangre que corroe el papel, ahora son la voz
De esta noches en las que el aire se enrarece.



Ahora soy yo quien pide que no olvides tu promesa, y
Si es que existe ese mundo de libertad en que tú creías, donde la luna llena
Aparece en ese cielo y el aire como pétalo de rosa tu piel fría acaricia

Escucha y dime, si es que vale la pena esperar,
Cumple tus palabras y permíteme gozar del silencio que para mi guardaste,
Déjame contar al mundo esa historia donde un alma noble
Puede romper los límites de su existencia, donde la perfección se alcanza
A pesar de esta condición humana.

Sin importar que hoy, aquellos a los que tú amaste,
Te han olvidado y ya muy pocos se atreven a pensar siquiera en ello
Se que amaste como solo pocos, sin bien no fue merecido

Ahora yo, respondo a tus palabras, esperando que
Hayas encontrado ese mundo, del que en tus noches
Solitarias te enamoraste, pues me lo haz mostrado como obra de arte,
Su inmensa pureza; noche de lúgubres poetas.




Gracias por tomarse el tiempo de leer esto.


Entre palabras eternas se esconde el secreto de un alma siniestra.


Hasta la proxima luna.